La industria de los combustibles fósiles liberó 389 MtCO₂eq adicionales a la atmósfera en 2024 al quemar gas innecesariamente, según un nuevo informe del Banco Mundial. El informe reveló que se quemaron 151 mil millones de metros cúbicos (bcm) de gas durante la producción de petróleo y gas en 2024, un aumento de 3 bcm en comparación con 2023. La quema de gas a nivel global aumentó por segundo año consecutivo, alcanzando su nivel más alto desde 2007.
A pesar de los esfuerzos internacionales para frenar esta práctica, la intensidad de la quema de gas se ha mantenido persistentemente alta durante los últimos 15 años. En 2024, solo nueve países —Rusia, Irán, Irak, Estados Unidos, Venezuela, Argelia, Libia, México y Nigeria— fueron responsables del 76% de todo el gas quemado (en comparación con el 65% en 2012). Rusia (28.9 bcm), Irán (22.8 bcm) e Irak (18.2 bcm) registraron los volúmenes más altos.
Sin embargo, algunos productores, como Angola, Egipto, Indonesia y Kazajistán, han logrado reducciones significativas. Kazajistán, por ejemplo, ha impuesto fuertes multas a los infractores y ha reducido la quema en un 71% desde 2012. No obstante, en muchas partes del mundo, las regulaciones para limitar la quema rutinaria siguen siendo débiles o se aplican de manera deficiente. Las empresas a menudo carecen de incentivos para detener la práctica, ya que normalmente no están obligadas a pagar por los daños ambientales que causa.